Porque de la entraña nacen,
ardiendo mil sensaciones
y hasta la boca suben,
llamaradas de pasiones.
¿Eres tú, alma de amor,
el bien que yo más anhelo?
Dime si estoy confundido,
si cuanto siento es mentira,
que todo lo que nos da vida,
¿pronto caerá en olvido?
¿Eres tú, alma de amor,
el mal por el que respiro?
Por el aire me ha venido,
volando o en remolino,
apegos que quiero darte,
por besarte torbellino.
¿Eres tú, alma de amor,
la ayuda que más aspiro?
Corriendo viene a la fuente,
la sed que saciar no puedo,
sediento por los caminos,
soñando con mis empeños.
¿Eres tú, alma de amor,
manantial de mis suspiros?
Lucas
24 enero 2010 — 15:15
Preciosista y bella tu divagación. Por favor, sigue haciendo poesías como esta. Saludos
B
6 febrero 2010 — 13:09
Simplemente precioso.